![](http://garciamolina.es/wp-content/uploads/2019/10/Maxibrico1-1024x680.jpg)
La empresa Bricoking, de distribución y venta de artículos de bricolaje, abrió en el centro comercial y de ocio Plaza Imperial de Zaragoza su vigésimo tercer establecimiento en España, en el que invirtió cuatro millones de euros. La empresa poseía un capital íntegramente gallego y pertenecía al Grupo Jaerod. El Maxi Bricoking Zaragoza, la primera gran superficie de esta compañía gallega en la capital aragonesa, generó 60 puestos de trabajo y se incluía dentro de su plan estratégico de expansión por toda la Península.
![](http://garciamolina.es/wp-content/uploads/2019/10/Maxibrico2-1024x680.jpg)
La tienda ocupaba una superficie de 5.000 metros cuadrados, en donde se ofrecía un completo catálogo de 30.000 referencias de bricolaje y se vendía todo tipo de herramientas, muebles, revestimientos de paredes, techos y suelos, tratamientos de madera, pinturas, sistemas de iluminación y útiles de jardinería, entre otros artículos. El horario de apertura era de 10.00 a 22.00 horas ininterrumpidamente de lunes a sábado. Bricoking contaba entonces con establecimientos en las comunidades de Castilla-León, Castilla-La Mancha, Cataluña, Andalucía, Cantabria, Murcia, Navarra y Galicia, que sumados al de Zaragoza, ponían a disposición del público alrededor de 60.000 metros cuadrados comerciales, en los que se daba trabajo a unas 450 personas.
![](http://garciamolina.es/wp-content/uploads/2019/10/Maxibrico3-1024x680.jpg)
Esta enseña nacional nació vigorosa pero tras la crisis de 2008 no pudo ser capaz capaz de consolidarse y plantear batalla a los gigantes franceses y alemanes de la distribución. Viéndolo con perspectiva lo cierto es que el modelo de negocio, el verdadero alma de esta industria, sólo funcionó en determinadas situaciones y en tiendas muy concretas, casi siempre en el mapa gallego.
![](http://garciamolina.es/wp-content/uploads/2019/10/Maxibrico4-1024x680.jpg)
La mayoría de los proveedores apostaron por Bricoking en una historia repleta de avatares. Se llevó a cabo una alianza con los belgas de Hubo con su precipitada salida ulterior, refinanciaciones varias de una deuda que se antojaba impagable y un amago de concurso que terminaron espantando a los más devotos.
![](http://garciamolina.es/wp-content/uploads/2019/10/Imagen089.jpeg)
Con las tiendas vacías y los proveedores sin aliento para seguir apostando y sirviendo producto, la cadena gallega de bricolaje liquidó sus tiendas por cierre mediante un proceso de liquidación de sus stocks, con descuentos de hasta el 70 %.